El director
general de Prevención y Control de la Contaminación Atmosférica, Raúl Piña
Horta, se ha dedicado no a hacer su trabajo como servidor público estatal; más
bien, parece un presunto extorsionador cobrando derecho de piso.
Resulta
que ahora al señor se le ocurrió solicitar a los verificentros que deben pagar
500 mil pesos por línea y, con eso, tienen garantizada su concesión durante los
próximos seis años.
Lo
anterior, además de la cuota que deben pagar cada mes, que va desde los 80 mil
hasta los 100 mil pesos.
Un
servidor de esos que no se apega al eslogan de la gobernadora Delfina Gómez
Álvarez que dice: "El Poder de Servir", pero Piña Horta ocupa el
poder para servirse, y servirse con la cuchara grande.
Hay que
mencionar también que, dentro de esas actitudes de prepotencia, el Director
general de Prevención y Control de la Contaminación Atmosférica ha mencionado
en varias ocasiones que ni Delfina ni nadie le puede hacer nada; cree que el
PVEM, por ser aliado de Morena, puede hacer y deshacer a su antojo.
¿Dónde
quedan aquellas palabras de José Couttolenc Buentello cuando menciona que en
este gobierno se termina la corrupción, cuando los mismos militantes del Partido
Verde viven de la extorsión?
Creo que
en esta vida hay que ser congruentes entre lo que se dice y se hace, y parece
que en el Partido Verde esas cosas no van con ellos.
DE
SALIDA: Tras la
renuncia de Pedro Moctezuma Barragán como secretario del Agua en el Estado de
México, muchos otros tendrán que poner sus barbas a remojar, porque los rumores
están fuertes de que antes de Semana Santa habrá un par de renuncias más.
Llama la
atención el penúltimo párrafo del documento de renuncia, redactado por Pedro
Moctezuma, en el que deja de manifiesto que el gobierno que encabeza Delfina
Gómez Álvarez prefirió apoyar más a CAEM que a la propia Secretaría.
Habrá que
esperar para saber cuántos más se bajan del barco llamado gobierno del Estado y
si la persona que estará reemplazando a Moctezuma será un civil o un
especialista militar.
PARA
CERRAR: Hay que
comentar el gran circo que se ha armado en el Congreso de la Unión y todo para
no quitarle el fuero a Cuauhtémoc Blanco.
Quizá
como jugador de fútbol soccer dejó huella, pero hay que decir que como político
no ha sabido aprovechar las oportunidades.
Esperemos
que este circo termine ya sea con el desafuero de la única "Águila
Morena" o no.
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